lunes, 21 de enero de 2013

Dios Redondo


Estimado Dios redondo, 

¿ Y quien te ha dicho que los dioses no pueden cooperar con nosotros incluso en lo que depende de nosotros?, preguntó Marco Aurelio.

Lo sé por Juan Villoro, escritor mexicano del librazo de futbol, sin tilde en la u, llamado Dios es redondo.  Ahí  cuenta con maestría sobre esa Colombia que bailó a Argentina en el cinco a cero previo al mundial del 94 en su propia casa.  Ese equipo elegante que trascendió mas allá de resultados o logros paseando el toque de Valderrama desde finales de los ochenta hasta mediados de los noventas. Pregunta Villoro con igual elegancia: ¨ ¿Hay hazaña más propia de América Latina que la de estos bucaneros que practicaron la dignidad rebelde del alarde sin premio? .¨

Esa Colombia fue elegancia sin joyas, quizás exponente máximos del fútbol estético sin logros de esta región heredera del jogo bonito de Brasil, como lo fue el Perú de los setentas, Barcelona 90 y 98, América de Cali en los ochentas, el Cobreloa de Letelier, o el Ecuador que tantas veces vi jugar bien y perder cuando niño.  Así, si el sicoanálisis de Lacan es correcto y el lenguaje nos determina, cambiar el ¨Jugamos como nunca y perdimos como siempre¨ por el no menos acomplejado ¨si se puede¨ en verdad fue un gran logro.  Y si también es cierto que la imagen del espejo que ve el bebe lo llena de júbilo así como cuando nos llena de júbilo reflejarnos e imitar a nuestros grandes héroes como Antonio Valencia, vamos bien. Ellos nos dan una referencia de cómo quisiéramos ser y al parecer así serán nuestros futuros jugadores, como Valencia, fuertes, inteligentes, técnicos, y lo mejor, buenas personas.  Al menos eso siento al ver jugar a la mini tri, la sub 20 de Ecuador, que está buscando ir al mundial de Turquía con un juego que parece de otro país, de uno diferente, mejor. Al menos en el fútbol. 

Ecuador clasificó al hexagonal final del cual cuatro clasifican. El mundo parece estar cambiando ya que Brasil y Argentina, el local, quedaron fuera. Perú se acordó de su gran toque de los años setenta y al perecer tiene el nuevo Messi, Colombia el nuevo Valderrama ( pero zurdo ), y Chile juega a una velocidad más parecida a la Alemania del 2010 que a cualquier Chile que se ha visto.  Lo de Ecuador tiene como locos a los analistas porque a diferencia de nuestro poderoso equipo del mundial del 2006, este grupo es una especie de Barca con enanos técnicos que buscan mantenerla en el piso y al pie.

Es cierto, ayer jugamos como nunca y perdimos como siempre, pero la suerte también nos falló un poco cuando el vertical sacó un gol y se lesionó nuestro arquero.

En fin,  la suerte es que estos jóvenes no lo saben, eso del perdimos como siempre, ellos solo conocen que si se puede, que ya ganamos la libertadores, fuimos a varios mundiales y que Valencia es ídolo en el Manchester y el mundo. 

Dios, se que tienes otros pedidos más importantes, pero el mundo merece verlos jugar, que te cuesta.

att,

Yo